miércoles, 9 de enero de 2008

Insomne

A las 3.30 a.m. comienzo mi ya habitual travesía a la cocina. Otro acceso de tos, mientras que caliento el vaso de leche. Tres cucharadas de azúcar moreno, una de nesquick, dos minutos en el microondas. Es un buen relajante para las noches que no consigo dormir, ya no se si por el desfase horario, por ti o por la tos.
El caso es que me quedo en mi cama, pensando, dándole vueltas a todo, a tus problemas, a mi impotencia para solucionarlos, a mis propios problemas, al dolor de garganta que esta tos seca e inútil lleva provocándome de hace días. Supongo que es normal. Es eso de estar en el maldito punto medio, ni una niña ni una mujer. Parece que aun no estoy preparada para el mundo de los mayores, pero se que el de los niños ya no es para mí. Y de alguna forma me niego a aceptarlo, a renunciar a ello.
Lo que pasa es que no dormir no va a solucionar nada. Y ya empiezo a hacerme adicta a los paseos nocturnos hasta la cocina y los vasos de leche.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

yo si que te iba a dar leche por la noche...

Yo dijo...

Ok, Maikel, pero solo me vale con calcio, semidesnatada y vitaminas A+D+E, a ser posible marca Puleva y con un poco de azucar. Y ha de pasar dos minutos en el microondas, aproximandamente.

Yo dijo...

*azúcar

Yo dijo...

Fe de erratas nº2 Aproximadamente