sábado, 1 de junio de 2013

5 de la mañana

¿Qué haces cuando un hombre llora? En mi experiencia, las mujeres, igual por lo que la sociedad enseña, somos de lágrima más fácil, pero cuando un hombre llora, sabes que su mundo se  ha derrumbado.

Ni a dos metros de mí, y sin embargo tan lejos, pues el respeto me impedía acercarme e interrumpir el momento de dolor en el que yo no tenía cabida. Simplemente mi silencio y sus palabras en voz quebrada. "Me pasé 16 años maravillándome de que una mujer como ella se enamorara de mí, y ahora tengo que maravillarme porque no está."

Yo no sabía que decir. Escuchaba sus lágrimas y las sentía mías, abrumada quizá por la verdad que albergaban. Al final rompí el silencio:

"¿Qué pasó? Nunca me quedó claro," pregunté, a lo que él me respondió que ella se negó a curarse, y él se dejó engañar como un tonto, pensando que en realidad sí que lo hacía. "En verdad qué estúpido he sido, si no fuera porque es una tragedia, deberían escupirnos."

Y se culpa, como todos quizá cuando ya no queda nadie a quien señalar, aunque a veces no hay culpables. Y le atormenta pensar que en vida, ella pensaba que él no la quería, y que cuando discutían, el se iba con otras mujeres y pensaba que si ella se iba no sufriría, pero ahora que ella se ha ido para siempre, la busca en otros rostros y no la encuentra. Me dice que no piense en mañana, que aprenda de un hombre viejo, que ame hoy, sin reservas ni condiciones, y yo sé que está en lo cierto.

Al final no queda nada que decir más que decir que solo recuerda lo bueno, que los malos momentos se evaporan. Abrazada a mi almohada, cierro los ojos y espero, escuchando sus quedos sollozos, a que me atrape el sueño, pensando 'allá donde estés, mujer, que sepas que te quiere Sergio.'

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